En su nuevo libro, un erudito dice que Jesús probablemente no se parecía en nada a esta imagen moderna.
Los Evangelios en la Biblia dicen que Jesús era un judío que nació alrededor del año 4 aC. en Belén y vivió en Egipto como un niño por un corto tiempo antes de mudarse a Nazaret.
Estas escrituras no mencionan cómo se veía Jesús, aparte de algunas referencias a la ropa que usaban él y sus discípulos,
escribió Joan Taylor, profesora de origen cristiano y judaísmo del segundo templo en el King's College de Londres, en su libro "What Did Jesus Look Like?"
Para hacerse una idea del rostro de Jesús, Taylor recurrió a la arqueología y los textos que proporcionan pistas sobre la apariencia general de los judíos en Judea y Egipto en el momento en que Jesús vivió.
De acuerdo con la investigación de Taylor, en lugar de sobresalir sobre otros en Judea, Jesús medía cerca de 5 pies y 5 pulgadas (1,7 metros) de alto, o la altura promedio vista en los restos de esqueletos de los hombres allí en ese momento. La gente en Judea y Egipto tendía a tener ojos marrones, cabello negro y piel de color oliva.
Jesús aparece retratado en los evangelios como un carpintero que camina mucho, pero que a veces no tiene mucho para comer. Este estilo de vida activo, pero la falta de comida regular, significaba que probablemente era delgado, pero algo musculoso, dijo Taylor.
"Jesús era un hombre fuerte en términos del trabajo del que provenía, no se le debe presentar como alguien que vivió una vida suave, y a veces ese es el tipo de imagen que obtenemos".
Editado por
Antonio Pérez Díaz
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Original article on LiveScience
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